Observar cambios repentinos en el comportamiento de su compañero felino puede ser preocupante, especialmente cuando un gato mayor muestra signos de hiperactividad. Lo que antes era una rutina tranquila y predecible puede verse alterado por explosiones de energía, inquietud o vocalizaciones inusuales. Comprender las posibles razones detrás de este cambio es crucial para brindar la mejor atención posible a su mascota que envejece. Este artículo explora los diversos factores que pueden contribuir a la hiperactividad en los gatos mayores, ofreciendo información sobre el diagnóstico y el tratamiento.
Condiciones médicas
Existen varias afecciones médicas subyacentes que pueden manifestarse como hiperactividad en gatos mayores. Es fundamental consultar con un veterinario para descartar o abordar cualquier problema de salud que contribuya a los cambios de comportamiento.
Hipertiroidismo
El hipertiroidismo, una glándula tiroides hiperactiva, es un trastorno endocrino común en los gatos mayores. Esta afección provoca una producción excesiva de hormonas tiroideas, lo que puede aumentar significativamente el metabolismo y los niveles de energía.
- Los síntomas incluyen aumento del apetito, pérdida de peso, aumento de la sed y de la micción, vómitos, diarrea y, sobre todo, hiperactividad.
- El diagnóstico implica análisis de sangre para medir los niveles de hormona tiroidea.
- Las opciones de tratamiento incluyen medicamentos, terapia con yodo radiactivo o cirugía para extirpar el tejido tiroideo afectado.
Hipertensión
La presión arterial alta, o hipertensión, también puede provocar cambios de comportamiento en los gatos mayores, provocando a veces inquietud y agitación que pueden percibirse como hiperactividad.
- La hipertensión puede ser secundaria a otras afecciones como enfermedad renal o hipertiroidismo.
- Los síntomas pueden ser sutiles pero pueden incluir pupilas dilatadas, desprendimiento de retina o signos neurológicos.
- Los controles periódicos de la presión arterial son importantes para los gatos mayores, especialmente aquellos con problemas de salud preexistentes. El tratamiento consiste en administrar medicamentos para reducir la presión arterial.
Dolor y malestar
El dolor crónico causado por la artritis u otras afecciones relacionadas con la edad a veces puede manifestarse como un aumento de la inquietud o agitación. Un gato que sufre dolor puede caminar de un lado a otro, vocalizar excesivamente o tener dificultad para calmarse.
- Busque otros signos de dolor, como cojera, renuencia a saltar o cambios en los hábitos de aseo.
- Consulte con su veterinario sobre las opciones de manejo del dolor, incluidos medicamentos, fisioterapia o terapias alternativas.
Síndrome de disfunción cognitiva (SDC)
El síndrome de disfunción cognitiva felina (SDC), similar a la enfermedad de Alzheimer en humanos, es una afección neurodegenerativa que afecta a los gatos mayores. Puede provocar diversos cambios de comportamiento, como desorientación, cambios en los ciclos de sueño y vigilia y mayor ansiedad, que a veces puede manifestarse como hiperactividad.
- Los gatos con CDS pueden mostrar deambulación sin rumbo, vocalización excesiva o confusión.
- También pueden tener dificultades para reconocer personas o lugares familiares.
- Si bien no existe cura para el CDS, ciertos medicamentos y modificaciones ambientales pueden ayudar a controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida del gato.
Factores ambientales
Los cambios en el entorno del gato también pueden contribuir a la hiperactividad, especialmente en gatos mayores que pueden ser más sensibles al estrés.
Cambios en la rutina
Incluso los cambios menores en la rutina diaria pueden ser disruptivos para los gatos mayores. Esto podría incluir cambios en los horarios de alimentación, la ausencia de una persona familiar o la incorporación de una nueva mascota al hogar.
- Intente mantener una rutina consistente tanto como sea posible.
- Proporcione un entorno seguro y predecible para su gato.
Aburrimiento y falta de estimulación
Aunque los gatos mayores pueden dormir más, aún necesitan estimulación mental y física. La falta de enriquecimiento puede provocar aburrimiento e inquietud, lo que puede malinterpretarse como hiperactividad.
- Proporcione juguetes interactivos, como comederos tipo rompecabezas o punteros láser.
- Ofrézcale sesiones de juego regulares, incluso si son cortas y suaves.
- Asegúrese el acceso a postes para rascar y estructuras para trepar.
Deterioro sensorial
A medida que los gatos envejecen, sus sentidos pueden disminuir. La pérdida de la visión y la audición puede provocar ansiedad y desorientación, que a veces se manifiestan como un aumento de la actividad o la vocalización.
- Evite reorganizar los muebles para ayudar a su gato a moverse por el entorno con mayor facilidad.
- Utilice señales verbales para comunicarse con su gato, especialmente si tiene pérdida auditiva.
Problemas de comportamiento
En algunos casos, la hiperactividad en gatos mayores puede estar relacionada con problemas de comportamiento subyacentes.
Ansiedad
Los gatos mayores pueden desarrollar ansiedad debido a diversos factores, entre ellos, el deterioro cognitivo relacionado con la edad, afecciones médicas o cambios ambientales. Los gatos ansiosos pueden mostrar inquietud, caminar de un lado a otro y vocalizar excesivamente.
- Identificar y abordar la causa subyacente de la ansiedad.
- Proporcione un entorno seguro y protegido para su gato.
- Considere usar feromonas calmantes o consultar con un especialista en comportamiento veterinario.
Comportamiento de búsqueda de atención
A veces, el aumento de actividad en los gatos mayores es simplemente una forma de buscar la atención de sus dueños. Es posible que hayan aprendido que ciertos comportamientos provocan una respuesta, incluso si se trata de atención negativa.
- Asegúrese de que su gato reciba la atención y el afecto adecuados.
- Proporcionar refuerzo positivo para un comportamiento tranquilo y relajado.
- Evite recompensar conductas que busquen atención, como la vocalización excesiva.
Preguntas frecuentes (FAQ)
La hiperactividad repentina en un gato mayor puede deberse a varias razones, incluidas afecciones médicas como hipertiroidismo o hipertensión, síndrome de disfunción cognitiva (SDC), cambios ambientales o problemas de comportamiento como la ansiedad. Se recomienda un chequeo veterinario para determinar la causa subyacente.
Los síntomas del hipertiroidismo en gatos mayores incluyen aumento del apetito, pérdida de peso, aumento de la sed y la micción, vómitos, diarrea e hiperactividad. Algunos gatos también pueden presentar un pelaje descuidado o un nódulo tiroideo palpable.
Si bien no existe cura para el CDS, puede controlar los síntomas proporcionando una rutina constante, minimizando los cambios ambientales, ofreciendo estimulación mental a través de juguetes interactivos y consultando con su veterinario sobre posibles medicamentos o suplementos que puedan ayudar a mejorar la función cognitiva.
Los cambios de comportamiento no son poco comunes en los gatos mayores, pero siempre deben investigarse para descartar afecciones médicas subyacentes o deterioro cognitivo. Algunos cambios pueden ser signos normales del envejecimiento, mientras que otros podrían indicar un problema más grave.
Puedes proporcionar más estimulación a tu gato mayor utilizando comederos con forma de rompecabezas para que se entretenga durante las comidas. También pueden resultar beneficiosas las sesiones de juego breves y tranquilas con juguetes como punteros láser o varitas con plumas. Asegúrate de que tengan acceso a postes para rascar y lugares de descanso cómodos cerca de las ventanas donde puedan observar el mundo exterior.